Titular de la noticia
"Mi cura del cáncer fue un milagro muy currado"
La médica de familia y superviviente de cáncer Odile Fernández explica cómo cambios sencillos en la alimentación y el estilo de vida pueden prevenir y alterar la evolución de la enfermedad
La Doctora Odile Fernández en el buen camino
Mi comentario:
Es un ejemplo de la única
forma natural de curar el cáncer. Cuando la enfermedad llega cambiar el estilo de vida es absolutamente necesario y combinar el ayuno con una alimentación esencialmente de crudos, sin embargo, debo decir que no existen alimentos o
hábitos que sean de forma directa o lineal cancerígenos o curativos de la enfermedad, ni penalizar, ni alabar, no obstante, podemos clasificarlos desde los de menor a mayor residuos tóxicos como consejo de consumo, aún así, es difícil establecer o recomendar recetas que de forma general sean útiles para todos, cada persona atendiendo a los "mensajes" de su organismo debe actuar en consecuencia, sabiendo que todo
depende del orden, del equilibrio entre calidad y cantidad, ademas de la optimización de las funciones
del organismo para metabolizar y eliminar residuos.
Salvando el “legado genético” de cada persona, que nunca es determinante ni definitivo, cada uno es responsable con su actitud y conducta de la posibilidad de padecer cáncer, esto niega la influencia directa o lineal como causa de cáncer de sustancias o alimentos que siempre están sujetos a que sean metabolizados de forma correcta y los residuos más o menos tóxicos sean excretados de forma puntual y convenientemente, pero la llegada de la enfermedad y esta es la buena noticia: nunca es el final, si con la inmediatez necesaria se hace lo conveniente para que regrese el proceso, que por supuesto, no es ingresar más tóxicos en el organismo, sino todo lo contrario eliminar los que propiciaron la enfermedad y hacer que las células dañadas tengan la posibilidad de sobrevivir dentro del programa bioquímico que determina nuestra vida o mueran por incompatibilidad con un ambiente biológico regularizado.
Salvando el “legado genético” de cada persona, que nunca es determinante ni definitivo, cada uno es responsable con su actitud y conducta de la posibilidad de padecer cáncer, esto niega la influencia directa o lineal como causa de cáncer de sustancias o alimentos que siempre están sujetos a que sean metabolizados de forma correcta y los residuos más o menos tóxicos sean excretados de forma puntual y convenientemente, pero la llegada de la enfermedad y esta es la buena noticia: nunca es el final, si con la inmediatez necesaria se hace lo conveniente para que regrese el proceso, que por supuesto, no es ingresar más tóxicos en el organismo, sino todo lo contrario eliminar los que propiciaron la enfermedad y hacer que las células dañadas tengan la posibilidad de sobrevivir dentro del programa bioquímico que determina nuestra vida o mueran por incompatibilidad con un ambiente biológico regularizado.
http://smoda.elpais.com/articulos/cancer-alimentacion-milagro-muy-currado/3963
Francisco Martín Acris
Crecimiento Celular y Cáncer
fmacris1929@gmail.com
La Línea de la Concepción, 14 octubre 2013
España